domingo, 23 de mayo de 2010

Que sea tuya mi existencia.

Que tus ojos se claven un mi cuerpo. Que tu lengua afilada hiera mi espalda. Que tus labios rasguen mi piel. Que tus manos prodigiosas ahoguen mi respiración. Que tus brazos aprieten tanto que mi corazón retrase sus latidos. Que tu pelo arañe mi cara. Que tus pies pataleen sobre mi. Que sea doloroso tu querer. Que tu noche apague mi día. Que tu existir mate al mío. Que tu mente domine la mía.
Que nunca dolor tan dulce volveré a experimentar.

1 comentario: